OTROS LA
PELARON
Es como la palabra de epitafio que ahora me sirve de
prefacio para introducirles en la presente edición de GUAITARILLA PUEBLO DE
GUERREROS.
He comentado muchas veces en mis
crónicas, sobre los acaecerés en GUAITARILLA, nuestro pueblo, que ha hecho
carrera en pos del paradigma de la modernización que no es que sea malo per
se, al contrario hay que seguir
propendiendo por ello, pero requiere de un nivel de conciencia personal y
comunitario sobre LA VIGENCIA DE PEQUEÑAS COSAS O SIMBOLOS que han sufrido
deterioro por el paso del tiempo y en desafortunada decisión son arrasados “sin
pena ni gloria” o destruidos sin importarles nada; todo por cuanto nunca los
que dan la orden o los destructores se preguntaron ¿Cuál es el valor histórico o
cultural que tiene el símbolo? .
(Foto Escudo Vicarial 1965) Braulio B. Cerón Álvarez)
(Foto Escudo Vicarial 1965) Braulio B. Cerón Álvarez)
La
parroquia de San Nicolás de Tolentino, por decisión del señor obispo ALONSO
ARTEAGA YEPES, es elevada a la
categoría de VICARIA FORANEA, en
reconocimiento a la multitud de feligreses que profesan la fe cristiana a la gestión invaluable del sacerdote JUAN CLÍMACO ORTIZ, especialista en la
construcción de Templos modernos, sin ser ingeniero civil ni arquitecto; en
quien recae el honor de ser el primer vicario y a la permanente solidaridad,
cooperación y aportes económicos que la población diera en la década de los 60
a la diócesis de Ipiales para la construcción del Colegio Seminario Diocesano, por lo que el cura representaba en la palabra
encarnada de la oratoria sagrada, habilidad esta irrefutable a mas de ser un
gran líder quien se diera el lujo de construir tres grandes templos sagrados
como el de Ancuya, en honor a nuestra señora de
La Visitación; el Templo de Catambuco, se hizo entre los años 1.834 y
1.942, con la colaboración entusiasta de todo el pueblo.
La vicaría fue inaugurada por monseñor ALONSO ARTEAGA YÉPEZ, un 10 de
septiembre de 1965, quedando circunscritas las parroquias de IMUES, SANTANA Y
ANCUYA. Al acto inaugural asistieron muchos sacerdotes oriundos del pueblo, de
parroquias aledañas y de la colonia residente en Pasto, quienes arribaron en
caravana.
Como tal tiene su propio escudo de mucho
ingenio y creatividad de padre con algunos miembros del consejo parroquial, se envió
el diseño a Pasto donde en una platería se encarga de la obra, la cual lo
remite a Cali para su ensamblaje y acabados. Para su instalación llegan obreros
especialistas de Pasto, los cuales trabajaron denodadamente hasta horas de la
noche bajo mantos que impedían su vista para dejarlo a punto justo el día de la
festividad del santo patrono en que se presentaba a la feligresía. (FotoTemplo, Braulio B. Cerón Álvarez)
Fueron
momentos de alta emotividad y patriotismo pues la colonia residente en la
capital arribaba justo en la tarde del día anterior para compartir el regalo
del Señor Obispo al pueblo elevando a la categoría de Vicaria Foránea.
El
escudo fue colocado en el atrio o “hall” interno sobre el pórtico principal,
parte superior.
Donde hoy no vemos nada
SOLO EL HUECO DEL NICHO QUE LO CONTENIA.
A
la salida del vicario, por traslado a la ciudad de Ipiales, llega como nuevo
vicario el padre BERNARDO AREVALO BOLAÑOS
La
comunidad enteresa se desbordaba en MINGAS en la ayuda de la construcción de su
yemplo parroquial, la adquisisón del Reloj y por el escudo vicarial.
Foto Archivo de Mauricio
Solarte, probablemente
la tomara don Manuel Basante
El escudo Municipal más original después de los dibujo de
LUCAS SOLARTE, estaba en uno de los costados del mismo pedestal ( Fotos Pedestal y escudo municipal Braulio B. Cerón Álvarez)
LA GRAN
INQUIETUD HOY ES ¿Por qué se destruyen los íconos de nuestro pasado reciente? ¿Será
que no le importa “Un bledo a la gente” ?
¿será que no saben los
esfuerzos que generaciones anteriores hicieron para darle otra cara al pueblo?
¿Será que los que ordenan destruir y los que
destruyen no saben de la gran carga simbólica que estos íconos tiene para la
historia cultural del pueblo?
En pasada visita al municipio encontré que: El simón Bolívar
(obra en madera de artista ecuatoriano, está en el salón de actos del colegio
INSEN, aunque pintado alterándole su naturaleza, pero vale. El escudo vicarial
casi en ruinas no fue retocado ni restaurado para darle vida y vigencia. Y las
hojalatas de plata las tiene el señor GIOVANNI MONCAYO, a quien le propuse que lo arreglara bajo mi costa pecuniaria,
pero no hay voluntad. El Bolívar del pedestal lo tiene LUIS CERÓN, con la misma
actitud,
¿QUE SE PUEDE ESPERAR….?
Que …… UNOS
SE DIERON LA PELA Y OTROS LA PELARON.